sábado, 2 de octubre de 2010


Es muy curioso. Nunca me puse a pensar el por qué de la frase: 'uno no sabe lo que tiene, hasta que lo pierde'. Es tan curioso el hecho que una persona tenga que perder un objeto o, incluso, una persona para que se de cuenta que lo tenía e inclusive, la falta que le hace. Anoche estuve viendo una película que se llamaba : ''La última canción'', se trata sobre una chica de mi edad, que los padres son separados, y la madre les dice de pasar el verano con el padre. Cuando van, la chica esta lo maltrata al padre, porque piensa que los abandonó. Después de varias situaciones, ella se empieza a llevar muy bien con el padre. Un día, el padre tiene un ataque cardíaco y queda internado, ahí es cuando ella se entera que el padre hace un año, que tiene cáncer. Después de ayudarlo, y quedarse ahí apoyándolo al padre, muere. Yo no les puedo explicar lo mucho que lloré. Realmente creo que a veces no nos damos cuenta lo mucho que tenemos que valorar lo que tenemos, sea mucho o sea poco. Sólo por el hecho de que algún día lo vamos a perder y ahí es cuando nos vamos a dar cuenta cuánta falta nos hace; sea un objeto insignificante o una persona, alguien conocida o mismo, de nuestra familia.
La cuestión es ésta: 'tenemos que valorar lo que tenemos, sea mucho o sea poco, valoremos'. Tal vez sea la única, tal vez no, pero a veces me doy cuenta que me enojo con mis papás por boludeces, como por ejemplo, que no me dejen salir o cosas así; y no es que sea por pesimista ni nada, pero me di cuenta que si alguna vez me llego a pelear con ellos, y les pasa algo, esas van a ser nuestras últimas palabras, nuestros últimos recuerdos. Realmente queremos algo así? No lo creo.

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